jueves, 20 de agosto de 2009

DE TODO! :D


Mensaje Dorado

¡Qué pasa Pandas!

Ayer estuve mirando mi bola cristal, y percibí que un gran evento va a tener lugar mañana … Al principio no estaba segura, así preparé mi pócima especial para adivinar el futuro, y me confirmó también mis sospechas…

Mis queridos pandas: ¡Mañana será día del Panda de oro! ¡Sí, de verdad! ¡Mañana viernes!

Ya sabéis: en ese día todo Panfu estará a vuestros pies. Podréis montar a caballo, hacer carreras de coches, visitar la escuela submarina y comprar ropa y muebles para vuestra casa. Eso sí, tened en cuenta que cuando compréis muebles y ropa sólo podréis usarlos mientras seáis Pandas de Oro. Al día siguiente no los podréis usar, aunque todo lo que compréis estará guardado en vuestro perfil, y cuando seáis Pandas de Oro (o cuando llegue otro día del Panda de Oro) podréis usarlo.

¡Va a ser genial! Tengo unas ganas de que llegue mañana… ¡Espero veros a todos en Panfu! Una pena que Max y Ella también se lo vayan a perder… Yo pienso hacer muchas fotos y enseñárselas. ¿Se va a atrever alguien a disfrazarse de televisión? :D Para los que prefieran otro estilo, nuestros modistas, inspirándose en las aventuras de nuestros amigos Max y Ella en Australia han sacado una nueva colección:

Pic the Catalogue

Pic the Catalogue

¿Qué os parece? Yo creo que a mí el traje de rayas de trigre o leopardo o de lo que sea me quedaría bien… aunque lo que más me gusta es el sombrero con dientes de cocodrilo… Hum… ¿Y mezclarlo todo? Experimentad, queridos Pandas, y a ver quién está mañana más a la moda! ¿O quizá alguno de vosotros tiene alguna petición especial para nuestros modistas? Decidme decidme, que igual puedo hacerles alguna sugerencia ;-)

Día de Panda de Oro… estoy tan contenta como si me hubiese tocado la loteria :D

¡Love & Peace!

Kamaria

Max y Ella en Australia / Parte 1

Queridos Pandas,
aquí estamos en Australia, también conocida por
Down Under“ – ni idea de por qué. ¿Quizá alguno de vosotros lo sabe?

Australia parece ser un continente bastante peligroso: no sólo viven aquí más animales venenosos que en cualquier otro lugar, como serpientes y arañas… también hay un agujero gigante. Nada más desembarcar en el areopuerto oímos en la información: “Estimados turistas, no subestimen la peligrosidad del agujero de ozono, y protéjanse contra él…”. Así ahora ando con mucho cuidado, no vaya a caerme dentro. Cada paso miro bien dóndo pongo el pie, por si acaso… Aunque la verdad, aún no he visto ningún agujero, ¿tú, Ella?

Pues tampoco… No sé qué querría decir el señor del aeropuerto exactamente, pero será mejor que mantengamos los ojos bien abiertos, por si acaso.

¡Tengo una idea! Deberíamos ir cogidos de la mano. Así puedo sujetarte si te caes en el agujero, o tú a mí, si soy yo el que caigo. ¡Así es imposible que nos pase nada!

Oh, bueno, vale :roll:
Será mejor que vayamos a comprar crema de protección solar: el señor en el aeropuerto dijo también que aquí el sol es muy peligroso, así que será mejor que protejamos bien nuestra piel, o nos quemaremos… que estamos más blancos que la leche.

¿Quemarnos? ¡Oh, no! ¡Mi hermosa piel blanca! ¡Noooo!
Tenemos que buscar un supermercado de inmediaro, ahora mismo, ¡ya! Oh, mi piel empieza a picar… ¡Ella, vamoooos!

¡Vale vale, ya voy!
Como véis, tenemos un poco de prisa, pero pronto escribimos de nuevo, y…

¡Ellaaaaa! ¡Me quemoooooo!

¡Sí, ya voy! Qué exagerado…

¡Mantened las orejas bien abiertas!

Ella y Max

Novedades en Panfu

¡Qué pasa Pandas!

La boda fue genial, ¿eh? Tan romántica.. ¿Os gustó? Ya, fue una pena que los novios se marchasen tan rápido y no se quedasen al baile, pero entendedlo, ¡estaban ansiosos por comenzar su luna de miel!

¿Qué os paerció mi papel en la ceremonia? ¿Creéis que lo hice bien? Espero que pronto haya otra boda en Panfu y yo pueda oficiar otra vez la ceremonia ;-) Me lo pasé tan bien, que hasta hoy no me he recuperado para poder volver a escribir :P Pero aquí estoy de nuevo! Por ejemplo, tengo noticias de los modistos de Panfu: han sacado una nueva colección a los escaparates: “moda electrodoméstica”, y mañana martes encontaréis en el catálogo nuevos trajes muy interesantes – he conseguido unas fotos para vosotros:

Pic the Catalogue

Pic the Catalogue

¡A mí me parecen muy divertidos! A una Panda de mi edad no le pega eso, pero quizá a algún Panda más atrevido sí: seguro que pronto tendremos en Panfu televisores y microondas andantes. ¿Quién sabe si los televisores podrán dar las noticias y los microoandas preparar hamburguesas mientras caminan? Jajaja…

Por cierto, también hay novedades en las casas: ¡ahora tendremos casas ampliadas en Panfu, con varias salas! Sí, muchos las habíais pedido, pues con tantos muebles, amigos, mascotas… apenas había sitio. Sería bueno que los Pandas de Oro hiciesen fiestas en sus nuevas casas e invitasen a los demás, ¿no? ¡Podría ser muy divertido! Los arquitectos me han dicho que el jueves estarán disponibles, pero aquí tenéis algunas fotos:

treehouse_castlesmall

treehouse_spaceshipsmall

¿Y, qué me decís? ¿Algún mensaje para nuestros arquitectos? Porque yo estoy muy agusto en mi castillo, y ya estoy muy viejecita para mudarme, que si no quizá me mudaba a la nave espacial, con esas vistas tan galácticamente interesantes…

Love & Peace

Kamaria

Max y Ella en Asia / Parte 4

¡Hola Pandas!,

Os escribimos desde el aeropuerto de Hong Kong, mientras esperamos nuestro avión para Australia.

Sydney, para ser más concretos.

Vale, sí, Sydney – es que Max está un poco ofendido.

Tss… ¡en absoluto! Le habría dado su merecido al ladrón, si tú no te hubieses entrometido.

No estoy yo tan segura… Bueno, os cuento qué pasó:
Pues bien, durante nuestra estancia en el Tibet Max ha estado yendo muy a menudo con los monjes a “meditar” – lo que yo no sabía es que más bien lo que ha estado haciendo ha sido recibir lecciones de Kung Fu por parte de uno de los monjes, que resultó ser un maestro. Max lo hacía a escondidas, no quería que me enterase, pues sabe que estoy en contra de la violencia.

En Kung Fu no se practica la violencia, sino todo lo contrario. Se trata de aprender a defenderse cuando uno es atacado. Yo sólo quería poder defenderte cuando algún malvado personaje quisiese hacerte daño, Ella.

Ya lo sé, Max.. es muy bonito de tu parte. A veces eres muy dulce.

Psss… ¡¿Dulce?! Yo no soy ningún dulce.

Uy.. Bueno, es igual. El caso es que Max tuvo oportunidad de mostrar su habilidad en Kung Fu. Ibamos camino al aeropuerto, a toda prisa, pues llegábamos tarde, cuando de repente sentí cómo una mano agarraba mi bolso. “¡Al ladrón, al ladrón!”, comencé a gritar. Yo sujetaba mi bolso con todas mis fuerzas, pero el ladrón tiraba fuerte, y yo sabía que no podría aguantar mucho … Pero Max acudió enseguida al rescate. Sólo que en lugar de ayudarme a tirar del bolso se situó justo al lado del ladrón, levantó una pierna del suelo y empezó a hacer gestos con los brazos, como si nadase contra corriente. ¡Ja ja ja! Teníais que haberle visto, mi valiente Max… Parecía uno de esos pájaros, un flamenco, que intenta echar a volar pero que no acaba de salirle bien…

¡Eso era Kung Fu, Ella! Vi cómo el monje maestro del monasterio hacía eso exactamente… Aunque la verdad es que a él le salía un poco mejor…

El ladrón se quedó boquiabierto mirando a Max, sin saber cómo reaccionar, así que aproveché el momento de confusión para darle un fuerte pisotón. “UAUAUAAA”, gritó. Le hice tanto daño que tuvo que soltar el bolso. Escapó cojeando, y yo recuperé mi bolso. Y mientras Max seguía allí haciendo aspavientos y

manteniendo el equilibrio con una sola pierna…

No lo has entendido, Ella: ¡era la técnica del espantapájaros! Surtió efectó, ¿no?

Esto… Bueno, la verdad es que sí. Yo recuperé mi bolso y ambos salimos intactos. ¡Muy bien!
Y ahora nos vamos a Australia. ¡Estoy superemocionada!

Mantened las orejas bien abiertas,

Ella y Max – el maestro Kung Fu ;-)

P.S.: Con tanta acción hemos olvidado preguntaros: ¡Qué ta lal boda? Seguro que estuvo genial…¡Tenéis que contádnolo con todos los detalles, por favor! ¡Y falicitadles de nuestra parte!

¡Sí, por favor! ¡Que vivan los novios! Tanana, ya se han casado, ya se han casado…

Max, mejor si lo dejas, que hasta ahora no ha llovido ni un día..

Max y Ella en Asia / Parte 3

August 15th, 2009

Buenos días mis queridos Pandas,

no sabía que los monjes se levantaban tan temprano, incluso en el fin de semana. Esta mañana Max y yo dormíamos como troncos y de repente sonó el gong: ¡DOOOOONG! :!:
Saltamos de la cama como disparados, despiertos y listos para la acción. Max se fue con los monjes a meditar, no sé qué será eso – ¿alguno de vosotros lo sabe, por casualidad?
Bueno, mejor para mí, así tengo ahora un rato de tranquilidad para acabar de contaros la historia de mi abuelo. Pues como os iba diciendo, mi tatara-abuelo se marchó de Panfu en busca de sus antecesores, pero sin mucho éxito. Estaba a punto de perder la esperanza, cuando de repente…

Casi había perdido la esperanza, cuando de repente oí un murmullo… Me acerqué, pero había tantos bambús que no me dejaban ver nada. ¿Qué podría ser?. Luché con todas mis fuerzas para atravesar el espeso manto de bambús, cuando de repente: ¡PLUMPS! – me choqué con una enorme pared. Pero no era una pared normal, dura y fria. Ésta era más bien blandita y calentita… giré mi cabeza arriba… y entonces ví dos ojos negros grandes como platos mirándome fijamente: ¡era un verdadero oso Panda! Debía ser al menos tres veces más grande qeu yo. ¡Increíble, al fin lo había encontrado!
Pláidamente mascaba un bambú que sujetaba con su mano izquierda. Me miraba entretenido, curioso. Y entonces empezó a andar. Se giró y me miró, como indicándome que le siguiese, así que lo hice. Me llevó a un escondite donde había.. ¡un precioso bebé Panda!. Pues resulta que el gran Panda era una mamá Panda que buscaba un compañero de juegos para su hijo. ” ¿Por qué no?”, me dije. Pero al cabo de una semana me cansé de estar todo el día jugando. Además estaba hasta las orejas de bambú, y hubiese dado todo por un sabroso plato de espaguetti… Así que decidí continuar mis aventuras, me despedí y comencé un nuevo viaje hacia Pekín. Pero eso ya es otra historia…

Vaya vaya, interesante, ¡no? ¡Poder estar tan cerca de un verdadero oso Panda, tocarlo y jugar con él! Pero si yo me encuentro en medio de un bosque algo tan grande creo que me llevaría un buen susto … Aunque la verdad es que los Pandas son normalmente muy cariñosos, especialmente los Panfu-Pandas ;-)
Bueno, voy a echar un ojo a Max y ver cómo medita 8O
Y por favor, ¡mandad saludos a Penny y Lenny de nuestra parte! Ay, que rabia me da, no poder estar allí…

¡Mantened las orejas bien abeirtas!

Ella

Ah, por cierto: ¡os hemos enviado otra postal! El cartero nos comentó algo de “la sala de la sabiduría”… ¿Una idea de a qué puede referirse?

viernes, 14 de agosto de 2009

Max y Ella en Asia / Parte 2

¡Hola a todos!

Estamos en el Tibet y hemos encontrado al tatara-abuelo de Ella. Se llama “Pan Lee”, y tiene una pinta muy divertida. No lleva ropa normal como nosotros, sino que anda por ahí envuelto en una especia de túnica naranja. ¡Ah, y también tiene una reluciente calva, que parece un bola de billar! Y muchas arrugas en la cara.

Claro, es ya muy mayor… ¡Tiene más de 100 años! Y la túnica naranja la lleva porque es un monje budista, y vive en el monasterio, junto con otros muchos monjes, todos vestidos de forma tan divertida como él :) La verdad es que sí que es gracioso.

Al entrar en le monasterio sólo veíamos un montón de túnicas, pero ¿dentro de cuál de ellas estaría envuelto Pan Lee? Ni idea, imposible de averiguar, pues no conocíamos su cara. Pero yo tuve una brillante idea: en el centro del patio del monasterio había un Gong bronce gigantesco. Se me ocurrió golpearlo bien fuerte, y gritar después el nombre de Pan Lee.

Exactamente eso hizo Max. ¡Pero no nos imaginábamos que el Gong haría tantísimo ruido! Todo estaba silencioso, nadie hablaba ni una palabra – claro es un monasterio – y cuando Max lo golpeó el ruido fue tan atronador, que todos los ojos se giraron hacia nosotros. Entonces Max susurró con sólo un hilito de voz: “¿PPPP-Pan lee?”
Vimos a alguien intentando sobresalir de la muchedumbre: ¡era Pan Lee!
“Ella, ¿eres de verdad tú?”, preguntó confundido. Pero ni siquiera me dio tiempo a contestar: enseguida mi abuelito me estaba estrechando entre sus brazos.

¡Sí, estaba tan contento! No quería soltar a Ella ni para respirar.

Depués, por la tarde, tranquilamente sentados en el jardín del monasterio, nos contó todas sus aventuras. ¡Increible, todo lo que ha vivido, con sus más de 100 años!
Por ejemplo, nos contó por qué hace mucho mucho tiempo abandonó Panfu: a continuación os resumo la historia:

Por aquel entonces… Ay, sí, yo era joven, inexperto y un poco loco, y estaba obsesionado por descubrir el ancho mundo. Era simplemente incapaz de quedarme parado en un sitio, así que abandoné Panfu. Quería estudiar a nuestros antepasados, ¿sabéis?. Quería saber más de los osos pandas de los que procedemos. Ya sabéis a quienes me refiero, a los que viven en el bosque y se alimentan de bambú. Así que me fui a China. Me eché mi mochila al hombro y me marché a investigar los bosques chinos, a ver si encontraba algún oso panda. Días y días caminé por el bosque, cruzé ríos, subí montañas, atravesé pantanos, luché contra espesos bosques de bambú… pero ni rastro de los osos panda.
“No tiene sentido. ¿Quizá se han extinguido?”. Ya sabéis que no hay muchos osos panda.. Había perdido casi toda la esperanza, cuando de repente…

Oh, un momento, ¿no oyes el gong? ¡El desayuno! Oh, al fin, mi estómago hace ruidos desde hace ya media hora… No os importa si seguimos mañamna, ¿verdad?

¡Mantened las orejas bien abiertas!

Max y Ella

Max y Ella en Asia / Parte 1

“Ni hao”, queridos Pandas.
Significa “¿qué tal?” en chino, aunque en realidad se escribe de otra forma:

ni_hao

Pues yo eso no sé leerlo. ¿Alguno de vosotros quizá?
Ahora mismo estamos en “La Tierra del Sol Naciente” – así se conoce a China, por estar situada tan al este, por donde sale el sol.
Así que cuando mañana al levantaros miréis al sol, ya lo sabéis: justo allí debajo estamos nosotros ;-)

Aterrizamos en Pekín. ¡Impresionante, cuantísima gente! Nunca antes había visto tanta gente junta. ¡Y edificios tan altos! Ella y yo fuimos de la mano todo el rato para no perdernos.

Sí, era una medida necesaria. Aunque parezca un poco infantil. Yo sólo en una ciudad así me hubiese peeredido enseguida: ¡ni siquiera se pueden leer los carteles! Los chinos paracen amar los acertijos: yo creo que por eso todos los nombres de las calles están “en clave” :-0

¡No son mensajes en clave, Ella! El lenguaje chino es simplemente así, se compone de símbolos, y ellos los pueden leer sin problemas.

¿Pero dónde están entonces las letras?

En chino no existen letras como nosotros conocemos, Ella. Ellos utilizan símbolos que representan palabras completas. Mira, por ejemplo, como se escribe “caballo”:

chinesisch_pferd

¡Qué chulo! Incluso se pueden distinguir las patas. Pero, oye Max, ¿cómo sabes tú todo esto?

Esto… pues verás… Como sabía que veníamos a China, me propuse aprender Kung Fu, y para ir preparándome me compré un par de libros. Y allí aclaraban eso de los signos.

¡Pero habíamos quedado en ir a visitar a mi tatara-abuelo, y no perder el tiempo aprendiendo Kung-Fu!

Vale vale, no te preocupes. Ahora mismo cogemos el tren hacia el Tibet.

¡Yuju! ¿Conocéis a mi tatara-abuelo? ¿Alquien? ¿No? Bueno, no importa – la verdad es que yo tampoco. Emigró de Panfu antes de haber nacido yo – ¡es un gran aventurero!
Siempre quiso recorrer todo el mundo. Un día recibí una postal suya del Tibet, donde me decía que le encantaría conocer a su
tatara-nieta, osaea a mí, y me hizo mucha ilusión. Así que ahí vamos. Es muy muy mayor, más de 100 años: seguro que ha vivido muchas aventuras: ¡estoy deseando oirlo todo!

Hum… Yo no tengo ningún bisbisbis-abuelo. ¿Quizá alguno de vosotros? ¿O una bisbisbis-abuela? ¿Y también os cuentan historias?

Os escribiremos de nuevo nada más llegar al Tibet.
Hasta entonces,

¡mantened las orejas bien abiertas!

Max y Ella

P.D.: Kamaria nos ha escrito desde Panfu y nos ha dicho que este fin de semana va a tener lugar un gran evento en Panfu: ¡Penny y Lenny se casan! Y esta noche celebran su fiesta de compromiso en el Bar Pirata.. ¡Jo, y nosotros nos lo vamos a perder todo! Poco a poco empiezo a echar de menos a Panfu…

Max y Ella en Asia

lunes, 10 de agosto de 2009

Nueva Ropa! :D

Pic the Catalogue

Pic the Catalogue

Pssst ... soy yo, Kamaria. Sólo quería mostrar una pequeña fotografía.
Mírenla Bien:

foto

Entrevista exclusiva con los Smashing Pancakes a iniciar el verano de fiesta!

Hola pandas!

Hoy se ha acabado por fin, la última parte del verano sube en Panfu!

Estoy muy orgulloso de que mi Smashing Pancakes una entrevista exclusiva a tener. De otro modo, Max y Ella siempre han pedido a la pregunta, pero los dos de ellas tan sólo hacer un viaje alrededor del mundo, como usted seguramente sabe.

Pero creo que lo hice a mí mismo como una muy buena crema entrevistador, ¿no, ;-) ?
En la entrevista con la banda también son muy interesantes algunas cosas salen! Lean!:


Kamaria: Estimados Smashing Pancakes! Es genial volver a verlos en Panfu de la bienvenida! Pero díganme, ¿qué ha pasado porque estuvieron fuera por tanto tiempo?

Momo: Sí, de manera que es algo! Poco después de nuestra última comparecencia aquí en el verano de fiesta en el puerto, que en realidad quería ir de vacaciones. Bueno, pero es mejor venir!

Eva: ¡Exactamente! Después del concierto nos ha dado la música es un agente preguntó si no queremos hacer una gira! Las canciones que han hecho nuestros super gefallen. Se nos ofrece en este curso inmejorable total BAFF!

Patty: Si cierto, el total de krass!

Eva: Exactamente, y por mucho tiempo así que por supuesto que ha de practicar, practicar y practicar. Bueno y eso es lo que los últimos meses nos han hecho.
Kamaria: Wow, felicitaciones, eso es realmente genial! Esto también significa que entre ahora todo está a la Perfección?

Momo: Si. Veces me dicen que de esta manera: Las últimas semanas nos han demostrado que son nuestra pasión, la música, para ir. Esto nos ha hecho más madura. Además, Eva y hablar abiertamente sobre lo que nos molesta. Y si se mira el aire espeso, entonces vaya a la medida.

Eva: Así es, que tanto nos vemos de nuevo super! Sin embargo, nuestra estancia aquí en Panfu parece a alguien en términos de sensación de malestar que tienen ... (squints a Iggy)

Kamaria: Achso? ¿Y qué significa eso?

Eva: Bueno ...

Iggy (que pertenece a la palabra): No hay nada que decir! Eva, puede ver fantasmas ... bueno, que realmente debemos permanecer sobre el tema! Panfu es nun'mal el lugar que nos ha hecho es lo que estamos hoy. Y por eso queremos que el concierto para dar las gracias al partido de verano. Esto debería también al mismo tiempo el inicio de nuestro recorrido.

Patty: Los fans de Panfu realmente significa mucho! Por eso estamos totalmente orgullosos de estar aquí de nuevo para poder jugar.

Kamaria: Eso suena muy prometedor! Estoy seguro de que su concierto en el Summer Party un gran éxito. Cuatro Gracias por la entrevista!

¿No es genial saber que los Smashing Pancakes su primera gira de conciertos en exclusiva Panfu dar? Así que estoy realmente emocionada y no quiero perder!

Amor y Paz

Su Kamaria

Max y Ella en África / Parte 4

¡Hola queridos Pandas!
¿Y, ansiosos por saber lo que pasó aquella noche en el campamento tras el safari por Zimbabue? No queremos manteneros en ascuas, así que os lo vamos a contar:

Pues la sombra seguía justo delante de nuestra tienda, y hacía mucho ruido. ¿Qué podía ser? Se oía algo así como gruñidos… no,eran más bien gemidos… ¿Qué sería? No podíamos aguantar más ahí dentro sin hacer nada, así que muy silenciosos nos arrastamos hacia fuera. Por supuesto, yo delante, pues soy el hombre además de el más fuerte 8)

¡Oh, claro, Max, tu eres el no-va-más! :P
No os váis a creer lo que encontramos frente al campamento:

¡un elefantito!

Estaba el pobre tan solito, una cría tan pequeña… Estaba llorando, seguro que se había perdido. ¡Pobrecito! Al verme vino corriendo hacia mí y comenzó muy cariñosamente a acariciarme con su trompa: ¡seguro que se creía que era su madre!. Debía ser tan sólo un bebé, pero aún así era al menos dos cabezas más grandes que yo. Y ni rastro de sumadre… ¡+pero muy lejos no podía haber ido!. Enseguida nos dimos cuenta de que el pequeño elefantito necesitaba nuestra ayuda: ¡Ella y Max al rescate!

A Ella se le ocurren unas cosas.. ¡A mi no me parecía nada bien! A fin de cuentas puede ser muy peligroso andar a oscuras solos por medio de la sabana.

¡Aj, Max! ¿Qué habrías hecho tú si se hubiese tratado de NUESTRO PROPIO hijo? Seguro que también te habrías alegrado si alguien te hubiese ayudado a encontrarlo.

¿Nuestro hijo? Mi querida Ella, Pandas no pueden traer al mundo bebés elefantes, eso deberías saberlo ya a tu edad.

Pero qué tonto eres, Max – yo no me refería precisamente a eso :!:
Pero, sí, Max tiene razón: los dos sólos por la sabana y de noche.. demasiado peligroso.
Despertamos al guía de nuestro safari, y afortunadamente nos echó una mano. Nos dijo que los elefantes sólo necesitan dormir unas cuatro horas por la noche, y que seguramente ahora debían andar buscando su desayuno. Así que nos condujo a una de las zonas donde los elefantes habitualmente comían.

Y no estaba ni mucho menos tan cerca como pensábamos… Durante más de cinco horas andamos a través de la sabana con el elefantito, y cuando ya empezaba a amanecer y casi habíamos perdido toda la esperanza, de repente descubrimos un pequeño rebaño de elefantes.

¡Oh sí! ¡Tan bonito! Fue precioso ver cómo el elefantito enseguida salió corriendo hacia su madre y cómo ésta cariñosamente le acarició con su trompa…A tí también te emocionó, Max, reconócelo.

La verdad es que sí: fue un momento muy enternecedor.

Bueno, pues al final de una estancia en África más turbulenta y emocionante de los esperado tenemos ya casi un pie en el próximo avión que nos lleva al otro lado del mundo: ¡Asia!

¡Mantened las orejas bien abiertas!

Ella y Max

P.S.: Mirad qué foto tan preciosa hicimos de la sabana africana con unas cebras:

max_ella-africa

Max y Ella en África / Parte 3

¡Hola Pandas!
Os escribimos ya totalmente recuperados después de todas nuestras aventuras y desventuras en el desierto del Sáhara. Pero a los dos superreporteros más viajeros de Panfu no los detiene nada, así que un día después de casi morirnos de sed en el desierto nos apuntamos a un Safari en Zimbabue.

¡Sí, fue genial! Durante el sasafari hemos visto un montóin de animales :O
Por ejemplo, justo al lado de nuestro jeep vimos a una jirafa que
comía plácidamente hojas de un árbol.. ¡de al menos 6 metros de altura!. Claro, con su largo cuello no tenía problemas en llegar a las hojas. ¡Pero aún así era bastante impresionante!

Ya ves, lo cerca que se pueden ver animales cuando uno hace un safari. En otro lugar había un par de lagunas, y allí vimos un grupo de antílopes: ¡qué animales más fascinantes! Tan ágiles y veloces…

Sí sí, se pueden ver de muy cerca, pero aún así yo prefiero observar la sabana y todos sus habitentes desde dentro del seguro y protegido jeep. Porque vale que la jirafa pueda ser bonita y simpática, pero preferiría no tener que vérmelas con un león hambriento.

Sí, vale, tienes razón. Pero aún así tienes que reconocer que es impresionante ver a los animales tan de cerca. ¡A mí nuestro tour me pareció genial! Es increible la gran variedad de especies animales que hay en África… ¡Y no me refiero sólo a leones, girafas o elefante, sino también a los venenosos escorpiones y cobras!

Pasamos la noche en una tienda de campaña. Os podéis imaginar que uno no puede dormir ahí muy tranquilo, pensando constantemente en qué visitante sorpresa puede haberse colado en tu saco de dormir…

¡Vaya gallina que estás hecho, Max! :-P

¿Yo? ¡ja-ja! ¡Tú fuieste la que se puso a gritar como una loca cuando oiste algo moverse frente a nuestra tienda!

¡Ahí fuera había algo seguro! Pero bueno, os lo cuento todo desde el principio
Después de un durísimo día de excursiones llegamos a nuestra tienda y caímos exhaustos de cansancio. Acabábamos de cerrar los ojos cuando empezamos a oir unos misterioso ruidos fuera, justo frente a nosotros. ¡Nunca habíamos oído algo así! Por supuesto no íbamos a poder pegar ojo. Así que ahí estábamos los dos, metidos dentro de nuestros sacos con los ojos abiertos como platos, rezando para que parasen esos ruidos… ¡Pero todo lo contrario, los ruidos iban en aumento! Hasta que de repente un enorme sombra acercó a la entrada de nuestra tienda: ¡era tan grande como el jeep safari!. La de cosas que se pasaron por nuestra imaginación al pensar qué clase de animal nos acechaba al entrada de nuestra tienda…

Sabíamos que así no íbamos a poder dormir nunca, así que haciendo un gran esfuerzo para vencer nuestro miedo, salimos a ver qué era el animal ése que nos acechaba…

¡El lunes os contaremos qué pasó!

Hasta entonces ¡mantened las orejas bien abiertas!

Max y Ella

Max y Ella en África / Parte 2

Hola queridos Pandas,

el miércoles os contamos cómo nos separamos de nuestro grupo de turistas en el desierto y cómo cuando más desesperados estábamos Ella descubrió a Carl Carusso haciéndonos señas desde un oasis.

Estábamos al límite de nuestras fuerzas. Como pudimos nos arrastramos hacia el oasis… Pero cuanto más nos acercábamos, más borroso se hacía, hasta que para nuestra desesperación nos dimos cuenta de que se trataba de un espejismo:

¿Sabéis qué es un espejismo?
Es algo así como una ilusión óptica, lo cual quiere decir que ni el oasis ni Carl Carusso estaban allí en realidad. El calor había jugado a nuestros ojos una mala pasada.

Llegó el momento en que la visión del oasis desaparació por completo. Nuestro camello, exhausto, se dejó caer al suelo y se quedó allí tumbado. Nosotros, que no estábamos mucho mejor, nos recostamos un poco en su tripa, que funcionaba muy bien como almohada, cerramos los ojos y nos echamos un sueñecito. Apenas habían pasado 5 minutos vimos cómo una sombra se posaba sobre nosotros. ¿Quizá Carl Caruso nos había encontrado?

“¿Quién es Carl Caruso?”, dijo una voz, “¿Y qué demonios hacéis aquí solos en medio del desierto?”. Era un nómada, ya sabéis, uno de esos habitantes del desierto que no tienen una casa fija, sino que se desplazan continuamente de un lugar a otro, sin permanecer mucho tiempo en el mismo sitio.

Nos dio agua: ¡uhmmm!… qué bien sabe el agua, especialmente cuando uno está a punto de morir de sed. Nada más beber nos sentimos mucho mejor.

Sólo que a Ella el calor se le había subido a la cabeza, y seguía viendo alucinaciones: no paraba de hablar de Carl Carusso, me ponía de los nervios.

No recuerdo nada de eso, la verdad… ui, pero me parece a mí que alguien está celoso…

Tsss… ¡¿yo, celoso?! ¡Nada de eso!
Ya hemos tenido bastante desierto. Hoy nos desplazamos hacia el sur, a Zimbabue. Pero como siempre os hemos enviado una postal

¡Seguro que la encontraréis! Llegará a lo largo del día de hoy – buscad en un lugar recientemente abierto en Panfu.

¡Y mantened las orejas bien abiertas!
Max
y Ella

Max y Ella en África / Parte 1

¡Hola Pandas!
Nos encontramos en serias dificultades: estamos solos y abandonados en medio del desierto del Sáhara :S

¡Pero cuéntalo todo desde el principo, Ella!

Sí, tienes razón. Pues Max quería ir al Sáhara sí o sí.

Bueno, yo pensé que en el Sáhara encontraría montones de arena para hacer castillos, como hago en la playa, y a mí me encanta hacer castillos de arena, así que cogí mi pala y mi cubo y…

… y nos fuimos al Sáhara. Pero vaya chasco, porque claro, para hacer castillos también se necesita agua, y aquí no hay ni el más mínimo rastro de agua.

Aún así el Sáhara es precioso: enormes dunas de un intenso color amarillo que se extienden hasta el horizonte. Nos dijeron que es muy peligroso aventurarse sólos en el Sáhara, y que se recomienda unirse a un grupo de turistas, y es lo que hicimos.
Nosotros nos unimos a un grupo enorme. Cada turista recibió su propio camello para montar, excepto Ella y yo, que tuvimos que compartir uno … ¡aunque el nuestro tenía dos jorabas! También nos dieron unos pañuelos árabes muy grandes con los que nos envolvimos el pelo y la cara, para protegernos del abrasante sol y de la arena. De repente nos sorprendió una tormenta de arena: ¡fue terrible, no veíamos absolutamente nada! Ni siquiera alcanzabamos a ver nuestras propias manos… y de repente cesó todo, y la tarmonta desapareció tan repentinamente como llegó.
Entonces miramos a nuestro alrededor… ¡y estábamos completamente solos! Mirásemos donde mirásemos sólo veíamos arena, ni uno solo del montón de turistas que nos acompañaban. Arena, arena, y más arena: sólo arena por todas partes. Decidimos ponernos en marcha, y como no sabíamos hacia donde caminar nos dirigimos hacia el sol. Y así llevamos ya dos días, y nuestras reservas de agua se están agotando… Incluso nuestro camello tiene mal aspecto…

Para, Max, ¡creo ver algo allí atrás!

¿Dónde?

Allí, mira … ¡es un oasis! … un momento: ¿No es Carl Caruso? ¡Sí, es Carl Carusso! ¡Carl Caruso nos saluda con la mano!

¿Cómo, Carl Caruso? No, no me lo puedo creer.

¡Que sí, seguro! ¡Nos ha visto y nos va a rescatar! ¡Rápido, vayamos hacia él!

Tenemos que salir volando.
Mantened mioentras tanto vuestras orejas bien abiertas.
Max
y Ella.

jueves, 6 de agosto de 2009

De Todo! :D

Hola Pandas,
Aqui les tengo un combo!!
osea que tenemos muucha ropa para ustedes! :P
aqui tienen ropa de África!! :D
Cool no?.x]

Pic the Catalogue

Pic the Catalogue

Y También de otras Estrellas de Rock!

como Indiana Jones, pero ayi dice Pandiana Jones hahahaha!. Y También Avril Lavigne, se acuerdan de ella? x], bueno, ayí dice Panda Lavigne jajajajja! me da muucha risa! x].

Pic the CataloguePic the Catalogue

Y como si fuera poco miren esto!

Como algunos de ustedes ya han adivinado correctamente, el único Smashing Pancakes a la fiesta de verano en el castillo de Panfu ocurrir! Sus conciertos se celebran cada media hora los viernes, sábados y domingos.

Es realmente grande que la banda después de tanto tiempo de nuevo se produce en Panfu! Estoy seguro de que está tan feliz como usted!

smashing_pancakes

Y ahora para el segundo host: Este es nuestro ayudante y aventurero Carl Caruso. Quería venir necesariamente visita veces, que yo le podría negarse mal. Por último, nos ha ayudado en ese entonces, Basepef librarse de ellos.

Por cierto, los cuatro de la banda me dio una entrevista a principios de la torre del castillo donde. Que usted puede leer el blog de mañana. Pero Iggy fue de alguna manera en la conversación no es tan bueno - si lo que Carl Caruso tiene que ver? El hecho es, y ha llegado antes de la entrevista anterior algunas palabras con los Smashing Pancakes cambiado. No parece algo entre Carl y Patty va a participar!

El mejor se adapte a sus descansos de fin de semana en el concierto de Smashing Pancakes así, tal vez alguien te dijo por lo de la banda algo al respecto.!

ahh y...

Lávense las Orejas!
-Saludos,
-Isis :D

lunes, 3 de agosto de 2009

Max y Ella en España / Parte 3

¡Hola queridos Pandas!
¿Y, habéis dormido bien?
Os queríamos contar acerca de Ella y su primera clase de flamenco.

La simpatiquísima bailaora de flamenco me invitó a pasarme por allí anoche y aprender unos cuantos pasos de baile. ¡Y yo encantadísima! Me puse mi traje de flamenco nuevo, saqué brillo a mis zapatos, peine mi pelo hacia atrás, y allí que me fui.

No estaba nada mal, para ser sincero – ¡ooops!

Ehm.. si… ¡uuups!
Caminamos por la misma acera del día anterior, y no tardamos nada en encontrarlos. En cuanto me vio la bailaora flamenca, me llamó para que me acercase y me preguntó mi nombre. “Lela, sí.. digo, no, Ella.. ” – ¡estaba tan nerviosa! La bailaora me dijao “Hola, Ella, yo me llamo Mónica. ¡Qué bien que hayas venido!”. Y entonces le dijo a Max: “¡Y tú, por favor, toca con las palmas el ritmo! ¡Olé!”. Y Max empezó a tocar palmas… pero de un forma un tanto arrítmica, vamos, más bien aplaudió, ¿sabéis? , como en las comedias de televisión cuando el público aplaude cuando ha oí do un chiste…

Pues no, la verdad es que no sonaba muy bien. Pero entonces se me acercó el cantaor flamenco, y empezó a tocar las palmas a lavez, y eso ya fue otra cosa, de repente empezó a sonar bien, y Mónica empezó a bailar. “¡Vamos, sígueme!”, le dijo a Ella, pero Ella, por más que se esforzaba, no conseguía que sus brazos y pies se pusiesen de acuerdo. “¡Ella, tienes que vivir el flamenco! Cierra los ojos, y siénte la música dentro de tí”.

La hice caso, cerré los ojos, y ¡fue una experiencia fantástica! De repente mis brazos y piernas se movían por sí solos al ritmo de la música, un sentimiento genial, en serio…

¿Alguno de vosotros sabe bailar? He oído que algunos de vosotros váis a clases de baile: ¿es cierto? ¿Qué baile os gusta más?

Nosotros nos preparamos ya para nuestro próximo destino: ¡África!

Y por cierto, os enviamos otra postal de España: ¿la habéis encontrado ya?

Lávense las orejas,
Max
y Ella

Max y Ella en España / Parte 2

¡Hola queridos Pandas!

¡La que hay montada en Sevilla! Ayer estuvimos dando un paseo por la ciudad, y vimos una actuación de un grupo de flamenco en vivo, que cantaba enmedio de la calle.

Sí, Ella salió disaparada como una flecha … y yo detrás de ella.

Había un montón de gente mirando. ¡La mujer bailaba tan bien! Tenía una expresión muy intensa en la cara, se notaba que vivía la música. ¡Y era tan guapa! El hombre a su lado cantaba y hacía palmas al compás. Sonaba algo triste, pero aún así encantador…

Sí, y tanto le gustó a Ella que empezó a bailar.

No pude evitarlo, mis piernas empezaron a moverse solas … ;-)

De repente se plantó Ella entre la bailaora y el cantante. No veas con qué cara la miraron… Dejaron de tocar y de bailar, y Ella se quedó allí sola moviéndose como si estuviese andando encima de ascuas y quemándose los pies. De la emoción tenía los ojos cerrados y no se daba cuenta de que todos la estaban mirando.

¡Vaya ridículo! Y luego Max empezó a aplaudir.. el único que lo hizo.

Sí, yo sólo quería relajar el ambiente.

Yo sólo pensaba: “¡Tierra, trágame!!” :o oops:

¡Tampoco fue tan terrible, no exageres, Ella!

Bueno… Eso sí, la bailaora era un encanto y me dijo que si nos pasábamos por allí esta noche otra vez me enseñaría un par de pasos de baile.

Y a mí me dijo que tenía que practicar cómo dar las palmas. Pss… como si no supiese: ¡cualquiere sabe hacer palmas!

Yo estoy nerviosa por aprender esos pasos de baile: ¡mañana os lo contamos todo!

Lávense las orejas,
Max
y Ella

Max y Ella en España / Parte 1

¡Hola amigos!

Así saludan los españoles – ¡jaja! – aunque eso ya lo sabíais, ¿no?

¡Al fin tierra firme! Buff… este largo viaje en barco realmente me ha hecho polvo…

Sí, el pobre Max se marea en barco, y se pasó todo el viaje con un color verde en la cara nada bueno…

¡Estaba taaaaaaaaaaaan mal! Ese continuo baivén del barco pudo conmigo. ¿Sabéis a qué me refiero? ¿Habéis viajado en barco y sufrido lo mismo que yo? Buff..

¡No te quejes tanto, ahora ya te has recuperado!

Sí, por suerte…

Ahora mismo estamos en Sevilla. Yo me he propuesto aprender sevillanas, pero para eso necesitaba lo primero un traje de sevillanas, así que me fui de compras, y arrastré a Max conmigo. Entraba en los probadores, me ponía los vestidos que más me gustaban, salía y le hacía un pequeño desfile de moda a Max, que estaba sentado delante. ¡Fue divertido! No sabía que ir de compras con chicos pudiese acabar bien.

Pero fue agotador.

Bueno, sí, tienes razón… es que había tanta elección… Por eso nos merecemos un descanso ahora. Pero mañana escribimos de nuevo.

Vuestros Max y Ella.